La Campaña “Reutiliza por Chile”, impulsada por Entel, Kiklos y el Centro Inclusivo de Reciclaje efectuó su cierre en Punta Arenas, con el fin de aportar a la economía circular y a la inclusión digital a través de la recolección de equipos electrónicos en desuso, que luego son reparados y destinados a estudiantes vulnerables.

La celebración del final del tour se realizó en el Liceo Nobelius y estuvo marcado por la donación de 100 notebooks que beneficiarán a estudiantes en contextos de vulnerabilidad de la zona, pertenecientes a las escuelas Elba Ojeda Gómez, Dellamira Rebeca Aguilar y algunos estudiantes becados del colegio sede del cierre, los cuales recibieron dispositivos reacondicionado para darles un nuevo uso.

El acto realizado en el recinto educativo contó con la presencia del alcalde Claudio Radonich, la seremi de Medio Ambiente, Daniela Droguett, la directora de Sostenibilidad y Medio Ambiente Entel, Jimena Del Valle, y el gerente de Desarrollo Kyklos, Diego Echenique.

Es así como 9 mil 200 celulares, CPU, notebooks y tablets han sido recibidos y diagnosticados para ver si se les puede dar un nuevo uso y donarlos a comunidades de escasos recursos, o si existe la posibilidad de que sean reciclados para asegurar una correcta disposición final y evitar que lleguen a vertederos.
Un significativo número que equivale a más de 31 toneladas de aparatos recuperados, a los cuales se sumarán los equipos que fueron recibidos durante la jornada de este miércoles y jueves en la Plaza de Armas, Benjamín Muñoz Gamero, de la capital regional de Magallanes.

La iniciativa, que comenzó en junio de este año con el tour por las diferentes regiones de Chile, es la más actual de una serie de acciones que Entel ha realizado como parte del eje de transformación consciente de la estrategia de sostenibilidad de la compañía.

En 2022, luego de dos años realizando campaña en Santiago, se tomó la decisión de salir de la capital y llevar esta iniciativa a distintas ciudades del norte y sur del país. Fueron 42 localidades a lo largo del Chile donde se recibieron aparatos electrónicos en desuso. Además, en 7 regiones, el trayecto se realizó en un camión 100% eléctrico, lo que permitió reducir hasta en cinco veces el impacto ambiental en emisiones de CO2, en comparación a un vehículo de combustión.