Este fin de semana Chile creció un poco más como país, en relación al desarrollo de los medios de comunicación y la importancia de salvaguardar y promover la libertad de prensa, la protección de las y los periodistas, y el derecho y acceso a la información. Y es que después que el año pasado se anunciara que Santiago de Chile sería anfitrión de la Conferencia del Día Mundial de Libertad de Prensa 2024, el Gobierno del Presidente Gabriel Boric, comenzó a preparar la que sería la 31° versión de este importante evento internacional, y que para suerte de todos nosotros los seremis de Gobierno del país, pudimos vivir in situ.

Es que el Ministerio de la Secretaría General de Gobierno, tuvo mucho que ver con la organización y puesta en marcha de este gran acontecimiento internacional, convocando a más de 2 mil 400 personas de más de 116 países del mundo, entre autoridades nacionales e internacionales, periodistas, académicos, representantes de la sociedad civil y activistas. Esta es la primera vez que América Latina se convierte en anfitrión de dicho encuentro, y Chile el primer país en realizarlo. En su intervención durante la ceremonia la directora general de la Unesco, Audrey Azoulay, recordó que hace 30 años la Unesco y Chile, organizaron la primera edición de lo que serían las futuras conferencias, en momentos cuando recién se estaba recobrando la democracia. Y luego agregó: “30 años después todo ha cambiado, debido a la irrupción del mundo digital, pero nuestro mensaje fundamental sigue siendo el mismo, hoy como ayer, la libertad de prensa es una piedra angular para la democracia y para afrontar los retos de nuestro siglo”.

Este año, la conferencia se basó en la temática “Prensa para el Planeta: periodismo de cara a la crisis ambiental”, con más de 50 eventos y charlas abiertas al público, con exponentes de la talla de la relatora especial de la ONU para la Libertad de Opinión y Expresión, Irene Khan; la periodista filipina y ganadora del Premio Nobel de la Paz, María Angelita Ressa; la periodista chilena y ganadora del premio Guillermo Cano 2010; Mónica Gónzalez; y el periodista ugandés experto en temas de agua y cambio climático, Fredrick Mugira.

Fue un enriquecedor debate de intercambio y reflexión, donde se abordaron temas transversales como la construcción de un futuro sostenible con libertad de expresión; retos antiguos y emergentes para el periodismo; la gobernanza y toma de decisiones, y la libertad de prensa en América Latina. Y además sobre cómo las sociedades actuales pueden tener más herramientas para enfrentar la desinformación, entre otros temas.

Este último punto, tuvo especial relevancia ya que como bien declaró la Ministra, Camila Vallejo, “Esto no es solamente un problema del manejo de los contenidos que circulan en redes sociales, sino por los efectos que está teniendo en las distintas naciones en el mundo”. Por esta razón, el Gobierno buscó que esta conmemoración del Día Mundial de la Libertad de Prensa, en sus diversos paneles de conversación, fuera la instancia donde se inicie una discusión regional de este nuevo desafío mediático e informativo internacional, como lo es la desinformación.

Para contribuir a ello, durante el evento un grupo de trabajo de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), el cual integra Chile -representado por el Ministerio Secretaría General de Gobierno-, junto a Lituania, Finlandia, Luxemburgo, Noruega, Grecia, Colombia, Estados Unidos y Francia, dio a conocer el reporte en español del documento titulado, “Hechos frente a falsedades: fortaleciendo la democracia a través de la integridad de la información”. Según el reporte, esta es una “primera evaluación de referencia de cómo los países de la OCDE están mejorando sus medidas de gobernanza para apoyar un entorno en el que la información pueda prosperar, dando prioridad a la libertad de expresión y a los derechos humanos”.

La jornada finalizó con la adhesión de 32 países a una nueva versión de la “Declaración de Santiago”. El documento aborda los nuevos escenarios informativos internacionales, tales como la comunicación en situaciones de conflicto, la desinformación, la violencia de género, y las amenazas que enfrentan las y los periodistas en el ejercicio de su profesión, entre otros.

En definitiva con la presencia de figuras emblemáticas en materia de medios de comunicación y protección medioambiental, nuestro país se convirtió en el epicentro del encuentro y la discusión sobre el rol del periodismo en el mantenimiento de la democracia. Y nuestro Gobierno subrayó que para la prensa la única forma posible para enfrentar al crimen organizado, al sicariato, a los nuevos hechos y formas de corrupción, a la nueva forma de producir guerras, al fenómeno mismo de la desinformación en plataformas digitales, es el multilateralismo, la única fuerza necesaria al momento de enfrentar estos problemas.