Más de dos mil medidores ha cambiado Aguas Magallanes, producto de la emergencia que azota a Punta Arenas desde hace dos semanas.
A modo de graficar la magnitud de esta contingencia, se debe considerar que la producción normal de agua potable en Punta Arenas es entre 32 y 35 millones de litros diarios, sin embargo, actualmente la demanda supera los 55 millones (70% adicional a lo habitual), es decir, cada día se producen y se pierden en las redes de distribución 20 millones de litros de suministro. Frente a estas dramáticas cifras, la comunidad no puede quedar indiferente.
Para intentar contener esta histórica y dura contingencia, Agua Magallanes ha desplegado un centenar de trabajadores en terreno, sumado a todo el equipo administrativo, bodegueros, técnicos y todo el personal que debe continuar trabajando para que las plantas y toda la infraestructura hídrica permitan que el sistema de producción y distribución siga funcionando. Asimismo, desde la Araucanía se sumaron a estas labores cinco maestros especializados en redes y dos supervisores. A partir de mañana se incorporan cuatro trabajadores adicionales de la misma empresa, lo que seguirá reforzando las cuadrillas en terreno. Por estos días, la contención de los equipos humanos, el frío extremo y en general las duras condiciones climáticas han sido un gran desafío.
Llamado
La empresa informó que del total de emergencias, 45% corresponde a problemas interiores. “Por una parte, prácticamente, la mitad del tiempo y recursos que la compañía despliega en terreno se debe a casos que debiesen ser atendidos por los propietarios de las viviendas”.
En segundo lugar, tal como lo establece la ley, el cliente tiene la responsabilidad de cuidar el medidor y toda su red interior, como cañerías, llaves de agua, entre otros; y la empresa sanitaria, tiene la facultad de cobrar el medidor en caso de falta de cuidado en su mantención.
No habrá cobros
Teniendo
en claro estos aspectos, de manera excepcional Aguas Magallanes no
realizará dicho cobro, haciendo un llamado a la comunidad a tomar las
medidas correspondientes dada la condición de clima extremo de la zona.
Cabe destacar que cada año Aguas Magallanes desarrolla un plan de
renovación de medidores, con el objeto de garantizar la exactitud de lo
que consumen los clientes. Este cambio no tiene costo adicional para los
usuarios, quienes, como ya se ha dicho, tienen sí la responsabilidad de
su cuidado y mantención.
Críticas
No obstante, también hay críticas de la población. Lorena Cárdenas escribió: “No normalicemos el desabastecimiento de agua, no nos echen la culpa a los usuarios de no proteger medidores, porque aunque se protejan son de mala calidad, antes los inviernos eran duros y esto no ocurría”, expresó.