Luego de la agresión con arma blanca que afectó la integridad física del joven Cristóbal Sepúlveda Silva, estudiante de la sede de enseñanza media de la Escuela Pedro Pablo Lemaitre, los escolares de esta comunidad educativa volverán hoy a su establecimiento para participar de la jornada especial de reflexión y contención convocada a nivel nacional y agendada con anterioridad por el Ministerio de Educación.
En la instancia, los escolares participarán en dos talles especiales que tienen por objetivo fortalecer la convivencia escolar y responde a la necesidad de generar un espacio seguro de encuentro, diálogo y acompañamiento tras la situación ocurrida recientemente.
A su vez, el establecimiento informó que los estudiantes recibirán su correspondiente servicio de alimentación escolar.
Repudian agresión
Considerando que el agresor del joven también es un estudiante, pero del Instituto Don Bosco, desde el establecimiento salesiano se difundió un comunicado en el que expresan su repudio a “la conducta del agresor, quien deberá asumir las consecuencias que correspondan”. A su vez, hicieron un llamado a los padres y apoderados de su comunidad educativa a “reforzar desde el hogar los valores del respeto, la empatía y la sana convivencia”.
Mirada del magisterio
La directiva regional del Colegio de Profesores alzó nuevamente la voz en relación a la situación actual de la convivencia escolar que afecta a los estudiantes y repercute en la sana convivencia al interior de los colegios.
A través de un comunicado, el magisterio señaló: “la falta de políticas integrales, el debilitamiento de las relaciones y estructuras sociales, la sobrecarga laboral del profesorado y la ausencia de apoyo real a las comunidades escolares, están llevando a la educación pública a un punto de quiebre”.
Es por esto que desde el gremio exigen cuatro puntos a las autoridades correspondientes:
-Recursos concretos y urgentes para planes de convivencia escolar reales, no sólo formularios ni “diagnósticos participativos”.
-Apoyo sicológico permanente en todas las escuelas públicas.
-Seguridad para los estudiantes, docentes y trabajadores de la educación.
-Políticas públicas que comprendan que la violencia no se resuelve con represión, sino con inversión, prevención y comunidad.