
La certificación se realizó en la sala del Concejo Municipal ceremonia en la que Paulina Álvarez Hernández, representante de la agrupación de sordos, realizó una exposición gestual en la que expresó la importancia de contar con un nexo comunicacional en las distintas instancias públicas, ya que hoy no existe conciencia de las necesidades especiales de los ciudadanos con dificultades auditivas, personas que encuentran respuesta tardía al solicitar algún servicio de primera necesidad. De la misma forma Álvarez indicó la necesidad de avanzar en comunicación no verbal en la enseñanza superior.
El área de discapacidad, dependiente de la Dirección de Desarrollo Comunitario (Dideco) del municipio local, pretende desarrollar un proceso gradual y participativo en el que se puedan involucrar diversas organizaciones públicas y privadas para de esta manera fortalecer las capacidades de los vecinos sordos.
La primera autoridad del gobierno comunal, Vladimiro Mimica, manifestó la importancia de provocar un cambio de actitud hacia las personas no oyentes, a partir de un mejor conocimiento de ellas como individuos con capacidades reales y no con limitaciones.
Las clases de señas chilenas fueron dictadas por la experta en lenguaje gestual Luz Hernández.