Un intenso trabajo realizan las máquinas dispuestas por el Enducross Moto Club, en el circuito Ricardo Navarro ubicado en el Barrio Industrial, para construir la nueva pista que acogerá la carrera de motocross nocturno que se disputará el 8 de enero próximo y que da inicio a las actividades del 2011 de la Asociación de Motociclismo de Punta Arenas (AMPA).La pista
El terreno se encuentra irreconocible, durante mucho tiempo el público se acostumbró a ver las carreras en un circuito que semejaba a un “bowl”, bordes altos y una depresión en el medio, y ahora está siendo emparejado, con la idea de dejarlo lo más plano posible, buscando mejorar la seguridad. Se han eliminado los espacios interiores de la pista, donde antes se ubicaba el público que, al menor accidente, formaba una “brigada de rescate” improvisada, que, más que ayudar se transformaba en un dolor de cabeza para la organización. En esta edición, los espectadores deberán acomodarse en el perímetro del circuito y dejar a los equipos de rescate hacer su “pega”.
Se han recuperado partes de terreno que no se utilizaban para darle un ancho mayor a la pista, la que tendrá seis metros en casi todo su recorrido, de manera que pueda albergar a las 20 o más motos, o hasta catorce ATV, que larguen simultáneamente.
Los saltos tradicionales que se venían utilizando, ya no existen. Se trabaja en un nuevo bosquejo, a cargo de Pablo Paredes y Javier Alarcón, para lo que han dispuesto, según Alarcón, los siguientes criterios:
1) Seguridad: Se eliminarán los bordes de la pista para evitar que el público se aloje en esos lugares.
2) Realidad local: Se diseñarán saltos y obstáculos acordes a la realidad local del deporte del motociclismo y de las categorías que en él participan.
3) Iluminación: Se han dispuesto nuevas torres para acomodar luces, tres camiones pluma que dispondrán de parrillas de iluminación y andamios que albergarán focos en varios sectores del circuito, para evitar que hayan puntos ciegos para los pilotos.
4) Espectáculo: La comisión tiene el objetivo de presentar un diseño acorde al evento, que sea fácil de observar para los espectadores que lleguen al Ricardo Navarro.
El 7 de enero los participantes podrán reconocer la arena y presentar sus reparos para que sean corregidos antes de la competencia.
Más seguridad
La edición 2010, la cuarta de la carrera, recibió a más de tres mil personas en el circuito, cifra que se espera superar en la próxima competencia, por lo que se han tomado los recaudos necesarios.
Habrá 14 banderilleros, guardias privados, cinco generadores de energía para convertir la noche en día. Además, gracias a un proyecto financiado, en parte, por el Instituto Nacional del Deporte, el Ricardo Navarro cuenta con nuevos baños y también habrá servicios de comida para el numeroso público que se espera. Sin embargo, nada supera al auto cuidado en una prueba de alto riesgo como esta, por lo que el llamado es a cuidar a los niños que estén presentes, ubicarse en las zonas autorizadas para los espectadores y evitar el consumo excesivo de alcohol.
El circuito se abrirá al público el 8 de enero, a las 16.00 horas, para permitir la acomodación, en tanto el valor de la entrada se fijó en $ 2.000, dejando la salvedad que los niños menores de 12 años no pagan.
