Una de las frases más duras que se han escuchado por parte de los magallánicos durante estos días de movilizaciones en rechazo al alza en la tarifa del gas, se refieren a su arrepentimiento por haber entregado su voto al Mandatario Sebastián Piñera durante las elecciones presidenciales , oportunidad en que registró una mayoría histórica en la región, puesto que cerca de un 55% lo apoyó para que gobernara el país.
Ahora, con el anuncio del reajuste en el precio del gas, que repercutirá en varios otros servicios locales, además de la actitud severa e inflexible que ha demostrado el Ejecutivo a nivel central, los ciudadanos sienten que “El pago de Chile” del Jefe de Estado está siendo injusto, después del resultado de las votaciones.
Y es que los magallánicos habían demostrado bastante comprensión con hechos que se habían suscitado anteriormente y que no iban en beneficio de la zona, al contrario, a las pocas semanas de haber asumido, la intendenta Liliana Kusanovic debió salir a defender ante la comunidad un reajuste presupuestario, que se iba a registrar para aumentar los fondos requeridos por las regiones afectadas por el terremoto del 27 de febrero pasado.
La noticia claramente no le gustó a nadie y comenzaron las críticas multisectoriales, en las que incluso Renovación Nacional (RN) y la Unión Demócrata Independiente (UDI) se sumaron, obligando a la máxima autoridad regional a enfrentar sola el escenario y sólo con horas trabajando en el servicio público.
Entre “el tira y afloja”, además de anuncios de nuevos recursos, para la gran mayoría de la población no quedó muy claro si el presupuesto regional habría quedado para 2010, igual como se había establecido antes de la catástrofe.
Posterior a esto se debía elaborar el Plan Magallanes, documento que señala los grandes hitos que espera lograr el Gobierno durante su gestión. Nuevamente surgieron las voces de cuestionamiento sobre el trabajo en “cuatro paredes” que estaba haciendo el Ejecutivo del Gobierno Regional, ya que ni los consejeros regionales tenían la oportunidad de aportar en esta “carta de navegación”, como se le calificó.
Es así como en ese período, llegó a Magallanes el Presidente Sebastián Piñera, anunciando que en esta región comenzaba su “Gira Bicentenario”, y como se estaba en una fecha próxima a las Fiestas Patrias, confirmó que se iba a realizar un cabildo abierto, para que toda la comunidad pudiera dar a conocer sus ideas y necesidades para llevar a la zona al desarrollo.
En esa visita estaban floreciendo las aprensiones sobre los despidos de trabajadores que se podían concretar en la Empresa Nacional del Petróleo (ENAP), por lo que para el sindicato era una excelente oportunidad para hablar directamente con el Mandatario, con el objetivo de conocer las posturas y dilucidar dudas. Pero el Presidente Piñera tenía una agenda muy apretada, porque los ejecutivos de Methanex y Geopark, lo esperaban.
En esas pocas horas de visita del Mandatario, el GORE quedó con la tarea de organizar el cabildo y bajar la molestia de los funcionarios de ENAP, porque el Jefe de Estado de paso dejó un comentario que sacó ronchas: “en Magallanes sí hay gas y petróleo, lo que pasa es que hay que saber buscar”.
Respecto de los recursos de Zona Franca, que llegaban a los $ 4.200 millones, y que el Consejo Regional exigía saber cuándo se iban a poder liberar para utilizarlos en diferentes proyectos, Piñera sólo se limitó a afirmar que “hay una ley que los mantiene retenidos, pero van a ser reincorporados al desarrollo de Magallanes”, pero aún no se sabe la fecha exacta ni el período en que la totalidad de los recursos serán entregados para su administración.
Posteriormente, el GORE anunció el “Cabildo Digital” como modalidad para que las personas pudieran aportar al Plan Magallanes, iniciativa que casi a ninguna junta de vecinos dejó contenta, porque las personas de avanzada edad no tienen conocimiento sobre el uso de las computadoras ni acceso a internet. Ante esto se creó otra alternativa manual.
Hasta la fecha el Ejecutivo local no ha dado a conocer los resultados de ese proyecto ni cómo se incluyó en el documento, ya que en noviembre, cuando nuevamente llegó a Magallanes el Jefe de Estado, el Plan ya estaba elaborado.
Precisamente en esa visita, el Presidente Piñera emitió la frase que hoy mantiene a la región culpándolo de no cumplir su palabra. “El sector residencial en Magallanes tiene un tratamiento especial en materia del precio del gas, y ese tratamiento especial se va a mantener. Les digo a los magallánicos que no hay nada que temer, porque hay buenas razones para que el precio del gas, que es un elemento tan vital, se mantenga en condiciones más favorables que para el resto del país”, dijo el Jefe de Estado.
Fue entonces este reajuste en el gas, que afecta notoriamente el bolsillo de todas las personas por el “efecto dominó” que produce, lo que agotó la paciencia de los magallánicos y los sacó a la calle para manifestarse y advertir que el pueblo está despierto.