La presidenta de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos de Punta Arenas, Rosa Zúñiga, se refirió ayer al por qué del distanciamiento que la mantuvo alejada durante todo el proceso de paralización regional, del trabajo de la ACM, luego de que muy acongojada, asistiera el martes a la firma del protocolo de acuerdo. “Yo vine a hablar con el ministro por un tema de las víctimas del accidente el primer día de paro. Me acerqué a hablar con él y me dijeron que lo esperara mientras estaba en las negociaciones”, dijo la líder vecinal luego de los trascendidos que indicaran que había negociado aparte como acusaron al edil Vladimiro Mimica el lunes.
Aseguró, de esta forma, que el interés que tiene como familiar de una de las jóvenes fallecidas, es aclarar quién va a correr con algunos de los costos por el lamentable acontecimiento y asumir la responsabilidad por el accidente.
Ante esto, dijo que fue convocada a las actividades de la ACM al igual que los demás representantes de las organizaciones sociales, pero que se alejó de ser cara visible del movimiento participando más activamente en las juntas vecinales luego de que sucediera el fatal suceso. “Yo estaba participando, se me había asignado puesto, estaba todo armado hasta que sucedió la desgracia esa noche y dije, las Juntas de Vecinos lo siguen haciendo pero yo no, porque no tengo el ánimo”, señaló.
Por ello, puso su rúbrica en conjunto con los parlamentarios y el obispo posterior a la firma de los representantes de la Asamblea.