Estacionar el vehículo particular en las calles del centro de Punta Arenas podría resultar excesivamente caro, de no contar con algunos estacionamientos privados, que implementaron un sistema de pago mensual para sus clientes. Lo mínimo que se puede llegar a gastar por estacionar el auto entre uno y 30 minutos son $350. En base a eso, y si la ciudad no contara con estacionamientos de empresas privadas, una persona que trabaje en el centro y que se traslade todos los días, de lunes a viernes, en su vehículo a su lugar de trabajo, podría llegar a pagar hasta
$ 123.200 mensualmente por tenerlo estacionado lo que dure su jornada laboral, es decir, durante, al menos, ocho horas.
Afortunadamente, existen otras alternativas, como la locomoción coletiva mayor y menor, o los mencionados estacionamientos privados, como los ubicados en calle Chiloé Nº 866, de Servicios de Estacionamiento Juncard, y en Ignacio Carrera Pinto Nº 572, de la Sociedad Cañoncar Limitada.
En ambos la media hora de estacionamiento cuesta $ 250, lo que significa un ahorro de $35.200 en el presupuesto de cada persona, si se utiliza el mismo ejemplo anterior, es decir, el de una persona que trabaja en el centro y se traslada en su vehículo particular, todos los días, y lo deja estacionado durante, al menos, ocho horas. También se puede cancelar mensualmente, lo que significa un ahorro mayor. En el caso de Juncard, el valor mensual por aparcamiento asciende a $28.500 o $30.000, dependiendo del lugar que se elija, según informó el encargado, José Águila Penoy. También existe la posibilidad de estacionar el vehículo durante las noches (desde las 19.30 a 8.00 horas), lo que implica un costo mensual de $20.000. Por noche, el precio es de $3.000. En el caso de Cañoncar, el valor mensual por estacionamiento es de $24.000. Otra de las alternativas para muchos automovilistas es estacionarlos en calles contiguas al centro, como en Fagnano, Waldo Seguel o José Menéndez, entre avenida España y Señoret. Sin embargo, ello, de paso, perjudica a los vecinos de dichas cuadras, quienes ven con molestia cómo cada día deben soportar autos ajenos estacionados frente a sus casas. Rosa Pérez, quien constantemente visita a una amiga en Waldo Seguel Nº 391, afirmó que desde las siete de la mañana comienzan a estacionarse vehículos particulares a lo largo de toda la cuadra. “Cuando se les reclama, argumentan que la calle es libre”, dijo. Asimismo, aseguró que pese a la visita de inspectores municipales, en algunas oportunidades, la situación no se soluciona.
Por su parte, Silvana Villarroel Ojeda, dueña de casa domiciliada en Waldo Seguel Nº 373, corroboró lo señalado por Rosa Pérez. “Este panorama se repite todos los días, desde que pusieron (el municipio) el pago de tarjetas en avenida Españá: se estacionan decenas de autos frente a nuestras casas y nosotros, que vivimos acá, tenemos que pagar tarjeta para poder estacionarnos”, indicó.
Finalmente, el vecino residente en José Menéndez
Nº 347 y que prefirió no identificarse, señaló que mientras se respete la salida de vehículos de su casa, el tema no lo complica. Agregó que en las ocasiones en que ello ha ocurrido, él mismo se ha encargado de recordar y advertir a los automovilistas, a través de una nota que coloca en el parabrisas de los vehículos, que está prohibido estacionarse en ese lugar y que de insistir en dicha conducta, avisará a Carabineros.