En términos de conectividad, el director regional de la Onemi, Rodrigo Santana, informó que “no hay mayor problema, en algunos puntos el agua aún está acumulada, pero está drenando naturalmente”. Las diversas condiciones climáticas que se han presentado en el último tiempo, han afectado a la región en distintos frentes.
Luego de las intensas nevazones, el aumento en la temperatura durante el fin de semana, propició una intensa lluvia la noche del domingo (se registraron 10 mm) y fuertes vientos.
La combinación de estos elementos produjo un efecto acelerado en el deshielo de la región, lo que incrementó el caudal de varios ríos que atraviesan la ciudad de Punta Arenas, llegando algunos a desbordarse en varios sectores de la ciudad. Luego de que el nivel de las aguas descendió, distintas organizaciones gubernamentales se encuentran realizando un balance para percibir de una forma general el alcance de los daños, por lo que la conectividad de Punta Arenas se podría restablecer en su totalidad en los próximos días.
Por otra parte, el director de operaciones, Sergio Becerra, comentó que al interior de la ciudad estas inundaciones se deben a la falta de canalización de las cuencas de los ríos menores.
Becerra informó también que la dirección de operaciones realiza la limpieza de todas las cuencas durante el verano, para evitar la acumulación de basura y otros objetos que puedan obstruir el flujo del agua, y provoquen alguna inundación.
En algunos casos, estas limpiezas se deben hacer también en invierno, para lo que se emplea personal extra, mediante diversos programas de generación de empleo.