El reportero francés viajó hasta el fin del mundo para estudiar en terreno la iniciativa que se desarrollaría en Isla Riesco.
“Hay políticas que es necesario analizar. Es decir, ¿existe una verdadera necesidad de instalar una nueva fuente de energía?, o, de partida ¿consumimos bien aquella que ya disponemos?”, son las preguntas que propone. Hervé Kempf es un destacado periodista y escritor francés que publica sus investigaciones cada semana, desde 1998, en uno de los diarios más influyentes de Francia, Le Monde, donde mantiene la sección “Ecología”.
Su discurso, a través de los ocho libros que ha editado, ha devenido acérrimamente anticapitalista, en favor del medioambiente. Pese a las interpretaciones, rechaza ser militante de izquierda: “Soy ecologista”, responde enfático.
Diario El Pingüino lo entrevistó ayer, aprovechando que visita la región para un reportaje sobre Isla Riesco, el proyecto minero y sus opositores.
- Usted se encuentra en Punta Arenas para investigar la problemática ambiental en torno a Isla Riesco. ¿Qué opinión se ha hecho hasta ahora?
“Por el instante, estoy recién en el comienzo. Ahora voy a encontrarme con los ecologistas, después con gente de la compañía (Minera Isla Riesco), para tener los diferentes puntos de vista”.
“He constatado que existe un problema de fondo, sobre el calentamiento global, que hoy concierne a todos los países del mundo. Se sabe también que la quema de carbón (para el uso en termoeléctricas) es una fuente de monóxido carbónico muy importante”.
“Llegando a Chile, observé que hay una muy grande pérdida de energía, porque las casas tienen una muy mala aislación de calor. Incluso en Santiago, donde no hace demasiado frío en invierno, la gente me ha dicho que tiene frío, porque las casas tienen vidrios simples, sin materiales de aislamiento, entonces sin duda se pierde mucha energía”.
- Frente a esta realidad, ¿usted se atreve a proponer una solución?
“Sí, a partir de verdaderos programas de economía energética. No sólo en Chile, hace falta progresar aún más en materia de eficiencia energética. Y este progreso es interesante porque puede crear muchos empleos, porque cuando se instala termopanel y construcciones con mejores materiales, hacen falta también empleados capacitados y más personas para hacerlo”.
“Eventualmente eso puede suscitar una actividad económica muy interesante. Por lo tanto, hay políticas que es necesario analizar. Es decir, ¿existe una verdadera necesidad de instalar una nueva fuente de energía?, o, de partida ¿consumimos bien aquella que ya disponemos?
- Ahora, uno de los puntos fuertes de este debate, como en otras problemáticas socio-ambientales, es la economía. Por un lado está la posición que defiende la mina en razón de que abriría más de mil empleos bien pagados para la población local y, por el otro lado, el proyecto es rechazado dado que el carbón en definitiva producirá polución y el eventual deterioro del planeta.
“Podemos preguntarnos si las cifras anunciadas son exactas, o si realmente existe un problema importante de cesantía en Punta Arenas. Yo descubro este país, descubro lugares magníficos en torno a Punta Arenas, me pregunto si acaso no hay futuro para Punta Arenas, de convertirse en un lugar conocido en el mundo por sus ballenas, sus pingüinos, sus paisajes magníficos. La belleza de este mundo puede hacer venir tantos turistas como para levantar la actividad económica. Y por último, se pueden crear empleos de manera más inteligente, con lo que es la eficacia energética, capacitando albañiles en aislamiento térmico de casas. Eso ayudaría, al mismo tiempo, a economizar en la factura del gas, porque las casas serían más eficaces y en consecuencia Punta Arenas crecería económicamente”.
- Usted en esta ocasión ha sido invitado por Alerta Isla Riesco, la organización civil que se opone al proyecto minero, para conocer la problemática en torno a la extracción del carbón. Un lado muy criticado de este movimiento ecologista es que sus líderes, los hermanos Stipicic, a quienes se les señala tener intereses involucrados en el proyecto, ya que sólo desde que los sondeos que ellos permitieron en su propiedad arrojaron que no existía ahí carbón suficiente para explotar, habrían comenzado la campaña ambientalista. Además, se les responsabiliza de una parte del daño ecológico en la isla, por cuanto ellos han producido históricamente ganado exógeno, que ha mermado la biodiversidad en el lugar...
“Eso no lo sabía. Hace falta analizarlo. En primer lugar, ayer estuve en una reunión por la Defensa Ecológica Austral, y vi que había juristas, científicos, gente que no era de la familia Stipicic y defendía esta causa ecológica. Lo segundo es que, hay una gran diferencia entre el impacto ecológico de los corderos, frente a las cinco minas que se han previsto. Habrá que hacer un balance”.
- Por otra parte, se ha puesto en el tapete las acciones que posee el Presidente Sebastián Piñera en la empresa Copec, que hace parte de Minera Isla Riesco.
“Acá yo quiero ser muy prudente, por lo que voy a hacer una perífrasis. Mi último libro ‘De la oligarquía ya es suficiente, viva la democracia’, que analiza como en muchos países occidentales los regímenes democráticos, de hecho, se degeneran porque el poder es acaparado por un pequeño grupo de personas extremadamente ricas, financistas, banqueros, que tienen intereses cruzados en todo el país y que toman las decisiones. Eso se observa en EE.UU., en Francia con Sarkozy, que es gran amigo de Piñera, en Italia con Berlusconi. Y constato que Chile desde hace más de 30 años hace un viaje difícil, pero muy importante, hacia la democracia, sin embargo, en este momento es gobernado por una oligarquía”.