Ayer se celebró el Día del Funcionario Municipal, instancia que a diferencia de otros años no sólo tuvo de dulce entre los trabajadores de la Municipalidad de Punta Arenas, sino que también de agraz, ya que las relaciones con el alcalde Vladimiro Mimica Cárcamo están gravemente quebradas. De hecho, el presidente de la Asociación de Funcionarios Municipales (Asemuchpa), Jorge González, aseguró que al desayuno que se les brindó el edil, no estuvo invitado él ni nadie de la directiva.
“Estamos desmotivados, el clima no está bueno, hay problemas. He firmado oficios por distintas temáticas, pero no hay respuesta, parece que no hay preocupación, no sé cuál es la estrategia”, acusó el dirigente, aunque enfatizó que “pero a pesar de todo esto, la gente está primero, la atención de la ciudadanía”.
En este sentido, González adelantó que la próxima semana intentarán dialogar con el jefe comunal para plantearles las problemáticas que poseen, porque sienten que no están siendo escuchados y, según aseguró, la única herramienta que posee la Asemuchpa para hacerse escuchar son las movilizaciones.
“Nosotros queremos que se reconozca la función pública que realizamos, pero cada vez que lo planteamos nos sacan el artículo 121, entonces necesitamos que se den más atribuciones a los municipios y que haya voluntad de solucionar nuestra realidad que nos está afectando”, expresó el dirigente.
El Día del Funcionario Municipal se estableció en 1997, mediante un decreto, donde se reconoce el 28 de octubre como fecha de celebración para estos trabajadores, y hace cinco años se emitió un dictamen para que los municipios pudieran destinar recursos para reconocer este día.
Consultado el municipio, se informó que el alcalde Mimica envió una invitación vía correo electrónico a todos los funcionarios municipales, sin excepción, para compartir el desayuno organizado.