
En la cita la encargada del centro y trabajadora social dio a conocer los lineamientos de trabajo que realizará junto al equipo de profesionales y monitoras que lo integran, “lo primordial es trabajar fuertemente la prevención, de lo que es la violencia intrafamiliar. También hacer un llamado a la comunidad a denunciar las acciones de violencia contra la mujer, ya que el que no denuncia se transforma en un cómplice de un delito”.
Quienes deseen efectuar alguna denuncia de VIF, indicó que pueden acercarse a la oficina del centro ubicada en calle Ignacio Carrera Pinto, “nosotros tenemos un fuerte trabajo en red con Carabineros e Investigaciones para que mujeres o personas que quieran denunciar sean tomadas inmediatamente estas denuncias”.
Al mismo tiempo, comentó la estrategia de trabajo que realizará junto a instituciones públicas, “se capacitarán y ojalá todos manejen el tema de violencia intrafamiliar y sepan que hacer frente a denuncias o casos que ellos conozcan, así que ese va a ser nuestro trabajo, lo que es la prevención y la intervención”.
Por su parte, el gobernador dijo que, “sabemos que una de las sombras que tenemos en nuestra provincia y en nuestra región es la terrible costumbre de muchos hombres de agredir a sus mujeres y eso es algo que no sólo nos preocupa sino que la verdad nos avergüenza”.
Frente a los hechos de violencia contra mujeres destacó el hecho que más mujeres se atrevan a evidenciar este problema, “el año pasado subió el porcentaje de denuncia de violencia intrafamiliar en un 11%. Digo que estoy contento porque ese es un gran paso, porque a veces en lo que es VIF lo que es más difícil es la denuncia”.
Seguidamente añadió que, “no se trata de andar castigando hombres, se trata de querer cambiar conductas, que tienen razones hasta culturales como hay muchos académicos que lo han señalado”.
Luego destacó la labor que realiza el Centro de la Mujer de Puerto Natales, “el desafío que tiene Carolina por delante es gigantesco, ella tiene que motivar, liderar a su equipo para darle un verdadero instrumento a nuestras mujeres. No podemos seguir en un estado de cosas en que el hombre muchas veces cree que es normal agredir a su mujer y mujeres que creen que es normal ser agredidas por su marido o por su pareja, y familias y barrios enteros que asumen que es normal que a las 3 o 4 de la mañana estén corriendo los chicos, llorando en la calle, muertos de susto porque el papá le está pegando a la mamá”.
Finalmente, manifestó que con este tipo de casos, “como sociedad no vamos a llegar a ninguna parte mientras la mujer esté sufriendo situaciones de violencia intrafamiliar”.