Circular a exceso de velocidad, no respetar los signos Pare y utilizar estacionamientos reservados continúan la lista. Además, no cruzar en las esquinas y no utilizar paraderos autorizados, se consideran los “pecados” del peatón. Que el conductor magallánico tiene sus “mañas” para conducir, no es novedad. Y sólo hace falta permanecer unos minutos en cualquier esquina de la ciudad para comprobarlo. Hechos que pese al aumento de penas, como la de “Tolerancia Cero”, no son posibles de erradicar.
De acuerdo a Claudio Ruiz, jefe (s) del Departamento de Tránsito de la Municipalidad de Punta Arenas, de las infracciones más comunes que se llegan a cursar, la principal consiste en transitar sin los papeles respectivos: “Yo personalmente llevo un registro de todas las infracciones que emiten los juzgados de policía local. El 80% es por conducir sin la licencia respectiva. El otro porcentaje viene por lo que es exceso de velocidad, no respetar los signos Pare, utilizar estacionamientos reservados y circular sin la documentación respectiva del vehículo”, señala Ruiz.
Infracciones que coinciden con las más cursadas a nivel nacional, las que encabeza el exceso de velocidad, es decir conducir a más de 60 km/h en zonas urbanas, seguida por circular sin licencia, estacionar en lugares no autorizados, conducir con la revisión técnica vencida y hablar en el celular mientras se conduce.
Aunque la fiscalización la efectúa Carabineros, y en menor medida inspectores municipales y de la Seremi de Transportes, en la práctica no es posible hacerse cargo de todas las transgresiones que también comete el peatón, las cuales en algunos casos ha acabado en lamentables accidentes.
Además, existen otro tipo de infracciones comunes, que por la rapidez o por la falta de denuncia quedan impunes. Entre éstas se considera el no respetar el paso peatonal o de cebra, un clásico de los conductores puntarenenses; el no usar cinturón de seguridad, algo que aún a estas a alturas, y pese a todas las campañas de educación, conductores y acompañantes insisten en no cumplir.
A estos se suman la no utilización de los paraderos señalizados y cruzar en lugares no habilitados.
De acuerdo al último Anuario Estadístico de Tránsito emitido por Carabineros, la mayor causa de accidentes se debió, en primer lugar, por conducir no atento a las condiciones de tránsito del momento, seguido de no mantener una distancia razonable o prudente, pérdida de dominio del automóvil y conducir en estado de ebriedad, entre otros.
La Ley del Tránsito divide estas faltas entre leves, menos graves, graves y gravísimas, las cuales de no haber una pena anterior, se sanciona con una multa que varía desde los 0,2 UTM (una UTM corresponde a unos $40 mil), hasta las 3 UTM por no respetar una luz roja, o un disco Pare, o conducir sin haber obtenido una licencia.
Pero entonces, ¿qué hacer para mejor la cultura vial del magallánico? Las campañas de educación parecen no ser suficientes. De acuerdo al director de Tránsito (s), quizás las medidas deberían ser una fiscalización y una sanción más dura “porque el único dolor grande que tienen todos los chilenos, es el bolsillo”, manifestó Ruiz.