Miércoles, 23:45 horas. La sala del Kaos está casi vacía. En una mesa esquinada, Jorge Ruiz y Susana Villarroel comparten unas copas y disfrutan lo que llaman “nuestros últimos cigarros”, a pocos días de que comience a aplicarse la Ley de tabaco en todo el país. “Lo primero el cigarro hace mal y eso nadie lo discute, es un tema de salud. Lo que me molesta es que se metan en mi privacidad, todos los países desarrollados cuentan con espacios para fumadores, aunque sea una pequeña pieza. En Punta Arenas el frío en invierno complica y uno sale a relajarse un rato después del trabajo. No está bien hecha la Ley”, comenta Jorge Ruiz.
Susana Villarroel, sigue atenta el discurso de su pareja y lo aprueba: “Cada vez tenemos menos espacios para divertirnos. Me parece bien que se respeten los espacios públicos, pero los fumadores deberían contar también con un lugar donde fumar”, indica.