
El hecho habría ocurrido durante el fin de semana, pero el domingo en la tarde el inspector general del establecimiento, Juan Moreira Vera, se percató que desconocidos ingresaron y sustrajeron diversos víveres que mantenían para la colación de los alumnos. De inmediato realizó la denuncia al 133 de la Central de Comunicaciones (Cenco) de Carabineros, por lo que al lugar concurrió personal del Cuadrante 3. Las pérdidas fueron estimadas en cerca de medio millón de pesos. Los antecedentes fueron entregados a la fiscal de turno, que dispuso la presencia en el lugar de los hechos del Laboratorio de Criminalística (Labocar) de Carabineros, que realizó el levantamiento de evidencia para dar con él o los autores del ilícito.