La Corte de Apelaciones rechazó ayer el recurso de nulidad presentado por la fiscalía de Punta Arenas que buscaba dejar sin efecto la sentencia del 27 de marzo que, por dos votos a uno, absolvió a Juan Carlos Lizama Beltrán, del delito de “desacato, supuestamente perpetrado el 6 de noviembre de 2010”. Este falló se resolvió con el voto en contra del magistrado Gonzalo Rojas, quien por los antecedentes investigados fue del parecer de condenar al acusado. No así sus colegas Jovita Soto y Luis Álvarez.
La historia que terminó en tribunales se remonta al 6 de noviembre del año 2010, en horas de la tarde, cuando la afectada se encontraba en un inmueble de calle Ricardo Maragaño, de la ciudad de Puerto Williams, a donde llegó el acusado, quien tenía prohibido acercarse a la mujer. El cual sin causa ni motivo justificado ingresó al interior y se dirigió hasta una de las dependencias, lo que fue denunciado por la afectada a Carabineros. Según la acusación, la policía sorprendió al hombre tendido sobre una cama, lo que para la fiscalía representó un “actuar ilícito del acusado toda vez que incumplió una resolución judicial dictada por el Juzgado de Garantía, de fecha 2 de octubre de 2010, donde le quedó prohibido acercarse a la mujer y a su domicilio.
Por una serie de considerandos, el Tribunal Oral terminó absolviendo al acusado, decisión que ahora fue confirmada por el Tribunal de Alzada.