
La denuncia que investigó la Policía de Investigaciones refiere que la menor de edad (nacida el año 2001) fue abusada en la casa por el “padrastro”, un día que la madre salió. “Aprovechando éste último la relación de confianza con la referida menor, como del hecho que la madre de aquélla se encontraba trabajando fuera de casa, procedió a efectuarle tocaciones de significación sexual”, tanto en sus genitales, pechos y glúteos, además de otros actos de connotación sexual.
Esto sucedió cuando el imputado mantenía dicha relación de convivencia con la madre de la víctima.
El Ministerio Público pedía para el acusado cuatro años de presidio, aunque los tres años que recibió igual dejaron conforme al fiscal.
El imputado ya no vive en Punta Arenas, pero producto de la investigación la policía logró ubicarlo para que se presentara a la audiencia donde fue formalizado por abuso sexual.
La principal prueba en la causa fue el relato de la menor, junto a otras incorporadas al proceso y que dieron por justificada la participación del autor.
El condenado podrá cumplir la pena firmando y le quedó estrictamente prohibido acercarse a la víctima.