
El objetivo del sitio -www.proyectoinocentes.cl-, según el defensor nacional Georgy Schubert, es abrir en Chile un debate que ya existe en países anglosajones, donde se han identificado diversas fallas en el sistema judicial. En EE.UU., por ejemplo, hay más opciones de revisar las sentencias.
La iniciativa de la Defensoría suma 29 testimonios de personas que estuvieron detenidas sin ser culpables... consignando en cada caso cuál fue el error cometido.
Según el académico de la Universidad Diego Portales, Mauricio Duce , se pueden identificar seis grandes causas que explican este tipo de situaciones. Cuatro tienen relación con la excesiva valoración de pruebas de baja calidad (identificación errónea de imputados, testigos falsos, falsa confesión y pericias de baja confiabilidad) y las otras dos se refieren a aspectos institucionales (conductas negligentes o dolosas de las agencias de persecución penal -policías y Fiscalía- y una defensa defectuosa).
Entre los testimonios del «Proyecto Inocentes» hay casos como el de cuatro amigos que permanecieron 120 días detenidos, acusados de asaltar una pizzería, o la increíble historia de S.A.C., quien fue imputado por violación... y absuelto nueve días más tarde gracias a un simple examen de ADN. En ambos casos, las víctimas se equivocaron al identificarlos.
Una de las situaciones más impactantes, presentada en un video, es la del agricultor Eleuterio Terán, de 65 años, quien pasó 15 meses detenido, acusado injustamente de un homicidio en Calama.
“Ni en el peor de mis sueños”
En la presentación del proyecto, en el Centro Cultural La Moneda, entregó su testimonio el escritor y conductor de TV Pablo Mackenna, quien en febrero pasado estuvo 48 horas detenido tras ser imputado falsamente de abuso sexual contra una menor. “Ni en el peor de mis sueños pude imaginarme algo peor que esto (...) No está dentro del guión del horror que yo tenía para mi vida. No contaba con que algo así me podía llegar a pasar”, dice Mackenna en el video que publica la nueva web.
En este contexto, la Defensoría propone medidas para evitar que se repitan este tipo de fallas. Si bien Schubert reconoce que en algunos puntos hay avances -como el nuevo protocolo para la identificación de imputados-, “en otros no se está trabajando”, como la idea de dejar registro de las confesiones de los imputados. A eso, dijo, se deben sumar mecanismos de indemnización a los afectados, una regulación para preservar la evidencia y poner menos restricciones para revisar las sentencias ante un posible error. Estos dos últimos factores, apuntó Schubert, han sido la clave para que en EE.UU. numerosos condenados hayan podido probar su inocencia.
En ese país, añade Duce, hay organizaciones como «The Innocence Project» que desde 1990 han conseguido 313 absoluciones. La cifra de condenas erradas en Norteamérica fluctúa entre el 0,5% y 5% del total, lo que se traduce en “miles de casos al año”, explica el experto. En Chile la cantidad de absueltos tras procesos judiciales son una realidad al alza: mientras el 2006 hubo 275 casos, la cifra llegó a 617 el año pasado.