
El Papa Francisco, que desea una iglesia más humilde y cercana a la gente, decidió suprimir los títulos honoríficos, entre ellos el de “monseñor”, una medida para acabar con el clasismo y el espíritu mundano dentro de la jerarquía eclesiástica. La medida fue tomada hace varias semanas y fue divulgada ayer por medios de prensa italianos.
El secretario de Estado del Vaticano envió una carta a los nuncios o embajadores de la Santa Sede en todo el mundo para que informen a los obispos sobre la medida.