
Una reciente nota del diario español ABC dice que uno de los primeros autores que citan “coño” en la literatura es Camilo José Cela. Precisamente fue el escritor gallego quien consiguió que dicha palabra se incluyera en el Diccionario de la Real Academia Española. Ya en el año 1968, en el preámbulo de su “Diccionario secreto”, Cela se lamentaba porque el Diccionario de la Academia “ignora por ejemplo, la voz coño”y no registra ningún cultismo que designe el concepto a que se refiere la palabra proscrita, con lo que se da el despropósito de que el aparato reproductor externo de la mujer no tiene nombre oficial en castellano.
Según el diccionario de la Real Academia Española, la primera de las acepciones de la palabra “coño” hace referencia a la“parte externa del aparato genital de la mujer” y como interjección se utiliza para expresar diversos estados de ánimo, especialmente extrañeza o enfado.
En Chile, según este mismo diccionario, el término se puede traducir por “español”, y en Ecuador puede ser un adjetivo con el significado de“miserable o tacaño”.
Al final, y en medio de tanta explicación, cómo no acordarse de José Luis Cárdenas Vargas, el “Coño” magallánico que allá por el año 1999 ganó 97 millones de pesos en el Kino.