
Decenas de miles de personas se concentraron en el centro de Madrid, unos tras atravesar andando el país, algunos recorriendo a pie los últimos kilómetros y otros uniéndose en la misma capital. Seis columnas de manifestantes -cada una de una región distinta- llegaron temprano a los suburbios de la ciudad y desde allí marcharon hacia la plaza de Colón con carteles con leyendas como “Marchando por la dignidad”.
Los altercados estallaron al terminar la protesta, cuando la policía cargó y disparó pelotas de goma contra decenas de jóvenes manifestantes que les lanzaban proyectiles.
Los jóvenes también montaron barricadas con algunas vallas, quemaron contenedores y rompieron los cristales de oficinas bancarias.
Esta gigantesca manifestación contra la austeridad, dejó como saldo 101 heridos leves -67 policías y 34 manifestantes- según indicaron los servicios de urgencia, mientras que la policía anunciaba la detención de 24 personas por agresiones a agentes y vandalismo.