En una agitada reunión, representantes de las uniones comunales de la ciudad se reunieron con ejecutivos de Edelmag y Gasco para zanjar las alzas que uno y otro servicio básico experimentarán. Fueron todos, menos la autoridad. A la cita no asistió ningún representante del Gobierno, demostrando su claro interés en el asunto.
En una primera instancia la cita fue programada para analizar el aumento que sufrirán las boletas eléctricas en Magallanes producto del alza del gas, situación que ya fue confirmada por Edelmag, y para que Gasco explicara detalles del acuerdo que hizo con Enap. Sin embargo, rápidamente las preguntas apuntaron a una posible colusión que existiría entre ambas empresas, por un nexo en sus directorios.
“Es cierto que las empresas tienen el mismo controlador, es información pública y no hay ningún secreto”, dijo el titular de Gasco en Magallanes, Peter Schmmol; mientras que el gerente de Edelmag, Carlos Yánez, aseguró que “es casi imposible que haya colusión porque somos empresas reguladas. El estudio de fijación tarifaria lo hacen las autoridades”.
Tras la reunión, los ánimos no eran muy diferentes a los de la entrada. “La marcha no se va a descartar. Es lo que la gente está pidiendo. Vamos a tener que llegar a eso porque el Gobierno dice que está haciendo las gestiones, pero cuánto va a demorar”, afirmó el presidente de la Unión Comunal Hernando de Magallanes, Norberto Catalán, quien comunicó que ya están reuniendo firmas.