
En su testimonio, Vukusic señaló que conoce perfectamente las patologías que afectan a Bórquez, ya que éste es su paciente desde hace 18 años.
El imputado declaró que cuando cometió el hecho había dejado de consumir los medicamentos hace tres meses y bebía alcohol constantemente.
Bórquez permanece recluido en la Unidad de Siquiatría Forence de la cárcel y la fiscalía requirió una pena de 10 años bajo la acusación de ser autor del delito de parricidio frustrado.