
Cerca de la medianoche, cuatro sujetos llegaron a ese inmueble golpearon la puerta. Los individuos ingresaron y dialogaron con Diego Armando Séspere de 28 años, aparentemente le reclamaban por “negocios”. En un momento se trenzaron en una pelea. En el interior del inmueble se encontraban su pareja y los hijos de la mujer. Uno de los hijastros de Séspere habría declarado que él se dirigió hacia otro sector de la vivienda en busca de un teléfono para pedir ayuda, cuando escuchó un disparo. Al regresar pudo constatar que la víctima estaba tirada en el suelo sin vida, y que los cuatro agresores habían escapado.
Pocos datos pudo recoger la policía al llegar al lugar, ya que la familia desconocía quienes habían sido los autores, y por lo tanto, no había datos concretos sobre dónde comenzar la búsqueda de los responsables de este asesinato a sangre fría.
Minutos mas tarde arribaron a ese sector de la ciudad el fiscal Fernando López Robbio y el secretario del Juzgado de turno, Luis Amarfil. La causa quedó en manos del juez Héctor Ochoa.