
La gobernadora de la provincia de Última Esperanza, María Isabel Sánchez, efectuó una visita al Parque Nacional Torres del Paine para verificar el avance de la reforestación que se efectúa en el lugar, debido a que en 2005, producto de un descuido, un turista produjo un incendio que destruyó alrededor de quince mil hectáreas.
“Estamos constantemente preocupados por este proyecto. Es por eso que quise venir personalmente a ver como se están desarrollando los trabajos, que es el resultado de un convenio entre la Corporación Nacional Forestal (Conaf), y el gobierno Checo”, señaló la autoridad.
Diariamente están siendo plantados entre tres mil y cinco mil árboles que son cultivados en invernaderos de Puerto Natales y que son llevados posteriormente Parque Nacional Torres del Paine.
“La actitud del gobierno Checo es digna de ser imitada. Ellos han querido reparar el daño causado por uno de sus ciudadanos y eso es valorable. Son en total 180 mil árboles los que van a ser plantados”, concluyó Sánchez.