
Primero hay que comprar los pasajes para Iquique, los que tienen un valor de $ 394.114; a eso hay que sumarle la estadía y alimentación rodeando más o menos en unos $ 500.000. Supongamos que usted quiere comprar un vehículo relativamente grande y cómodo y se decide por un Kia Sportage: este modelo año 2006 cuesta
$ 6.700.00. Posteriormente, hay que calcular cuál va a ser el gasto en combustible, más o menos
$ 455.714. Esto si consideramos el precio de la gasolina de 93 (rendimiento de siete kilómetros por litro), luego hay que hacer su internación a la Zona Franca de Punta Arenas (ZonAustral) hay que contratar a un despachante de aduana, el costo de ingreso del automóvil, de manipulación, salida y un 1,9% del valor referido del auto. En total más o menos saldría por unos
$ 8 millones. A eso hay que sumar que si el auto presenta alguna falla ¿a quién se va a reclamar?
Héctor Pacheco lleva varios años dedicándose a la venta de automóviles usados, internados por el régimen de Zona Franca. “Lo que yo hago es distinto de lo que hacen las demás personas cuando van a comprar autos a Iquique. Yo los traigo directamente desde Estados Unidos o Corea, vía contenedor hasta Valparaíso o San Antonio. Desde ahí, se traen vía terrestre hasta Puerto Montt donde son embarcados en el Ferri hasta Puerto Natales, para posteriormente traerlos a Punta Arenas y hacer su ingreso a Zona Franca. Por lo tanto, yo pago mucho más flete que el usuario de Iquique, porque como hay tanta demanda por autos nuevos o usados, sale un barco Roll On Roll Of que trae los autos directo Corea-Iquique con un flete a la mitad de lo que nos cuesta a nosotros”, expresó.
El empresario agregó que “a mí me cuesta más o menos US$ 1.300 por auto desde Corea
($ 692.770), mientras que al usuario de Iquique le debe costar unos US$ 700
($ 373.030). Ellos traen vehículos del 95-96, mientras que nosotros del año 2001. Nosotros vendimos un Galloper de dos puertas en $ 4.200.000. Un Galloper de cuatro puertas traído desde Corea me cuesta US$ 4.200, más el flete US$ 1.300, ahí ya estamos en $ 3 millones más lo que cobra el despachante de aduana, ahora para bajarlo entre peaje y combustible gastamos más o menos $ 140.000, a eso se le suma el pago de los choferes, los pasajes hasta Puerto Montt, la subida al Ferri, ya estamos en
$ 3.500.000. Hay que pagar el combustible, el despachante de aduana de Punta Arenas, hay que hacer el SRF, pagar el impuesto a la salida y la Zona Franca vamos a llegar a
$ 4.000.000 y lo tenemos en venta en $ 4.500.000”, expresó Pacheco. Agregó que “es mucho más barato lo que hacemos nosotros que lo que hace la gente yendo a Iquique”, precisó.