Los rayos de sol que iluminaron especialmente la tarde de ayer impulsaron a los puntarenenses a visitar a sus familiares fallecidos en el Día de Todos los Santos.
Si bien en la mañana el flujo de gente fue lento, después de almuerzo se notó un aumento considerable de visitantes en el Cementerio Municipal Sara Braun.
Tal como se tenía presupuestado, en total el camposanto recibió a más de 50 mil personas que como es tradición, este 1 de noviembre le dedicaron unas horas a los seres queridos que ya no están junto a ellos.
A pesar del alto número de personas, todo se desarrolló en forma tranquila. No se registraron incidentes ni atochamientos en el acceso ni en la salida del recinto.
“El balance es bastante positivo. Esta festividad del 31 de octubre nos está favoreciendo en la concurrencia al Cementerio. La gente se reparte entre el 31 de octubre y el 1 de noviembre”, afirmó el administrador del camposanto, Sergio Aguilar. Añadió que “se ha presentado un tránsito muy tranquilo, la gente no sufrió las aglomeraciones que antes ocurrían. Las entradas están bien delimitadas”.
Ventas
El sábado los floristas se quejaban de que no había mucha afluencia de público y, por lo tanto, las ventas estaban bajas.
Sin embargo, ayer la situación fue completamente distinta, porque a las 16.00 horas ya estaban rematando los ramos que les estaban quedando.
“Desde la mañana ya se veía gente comprando. Pero ahora, después de almuerzo se nota que está llegando más”, manifestó la vendedora Silvia Mancilla.
Similar impresión tuvo Rosa Torres, quien también instaló un puesto en el bandejón central de avenida Bories. “Las ventas han estado bien. Ahora en la tarde mejoró. Incluso estamos rematando. Pero ayer fue poco porque el clima estuvo malo”.
Los consumidores en tanto llamaron a cotizar, porque entre negocios se podían encontrar, aunque pequeñas, diferencias de precio.
“Los precios están casi igual que el año pasado. Pero varían de un acceso a otro”, aseguró María Muñoz.
Apoyo
Como parte de la seguridad y la planificación que realizó el Cementerio, ayer se contó con la presencia de 20 voluntarias de la Cruz Roja, quienes estuvieron atentas a cualquier problema de salud que pudiera haber aquejado a los visitantes.
La directora de gestión del riego del organismo, Luisa Maldonado,  expresó que “ha estado todo tranquilo. Hemos tenido alrededor de 15 atenciones, principalmente por problemas de presión”.
Otra importante función fue la que desarrollaron los diez voluntarios de la Defensa Civil, quienes cooperaron con la mantención del orden en la jornada.
Uno de ellos fue Arturo Barría, quien aseguró que “todo ha estado normal. Todo tranquilo. Desde las 14.00 horas empezó a llegar más gente”.
Misa
El camposanto ofreció ayer dos misas a los fieles. Una  a las 10.30 horas y otra a las 17.00 horas. Ambas estuvieron presididas por el obispo de Punta Arenas, Bernardo Bastres.