Un proceso de matrícula con polémicas se ha presentado durante las últimas semanas en algunos establecimientos de la ciudad.
A las largas filas de espera que se registraron en la Escuela Padre Hurtado, ahora se sumó una denuncia en contra de la Bernardo O’Higgins, en la que afirma que se está cobrando $ 14.000 para la inscripción de los alumnos.
El director, Julián Mancilla, reconoció que se le está solicitando a los apoderados ese monto porque “hay un acuerdo entre los padres de dos tipos, que es voluntario y donde se firma un documento en el que se comprometen a apoyar las actividades que realice el establecimiento para los alumnos. Eso tiene un costo de
$ 10.000, que significa $ 1.000 mensuales”, manifestó.
Esas instancias que requieren de dinero para su mantención son las jornadas de cine, la pizarra interactiva y la limpieza de los baños, entre otras necesidades que no alcanzan a ser cubiertas con el presupuesto que se le entrega al establecimiento.
De todas maneras el director aseguró que “si las familias no pueden cancelar quedan exentos, pero estamos segurísimos que la mayoría puede pagarlos”.
Asimismo, aseguró que “a nadie se le ha impedido matricular a sus hijos, hayan pagado o no. Pero hacemos un llamado a la conciencia de aquellos que están gastando y aprovechándose del dinero que otorga la gran mayoría”, puntualizó Mancilla.
Los $ 4.000 son requeridos por el centro de padres de la escuela.