Antonio Kirigin es profesor de Historia y Luis Legaza de Lenguaje. Ambos, hace más de 20 años ejercen la docencia y en 1996 decidieron crear su propio pre-universitario. “Al comienzo no teníamos nada, ni siquiera el local donde daríamos clases. Lo único que había eran ganas”, explica Legaza.
Hoy en el preuniversitario hay más de 75 alumnos y se ha convertido en uno de los que obtiene mejores resultados en la PSU a nivel regional. Legaza, que además trabaja en el Colegio Cruz del Sur, institución con el mejor rendimiento en Magallanes,  afirma que “nos ha ido excelente, ya somos una marca registrada”.
Los 75 alumnos se dividen en tres secciones. Durante la semana deben cumplir cuatro horas en el preuniversitario. “A veces es difícil para los estudiantes porque salen a las 18.00 del colegio y a las 18.30 llegan al pre, pero nosotros tratamos de motivarlos”, dice el docente.
Este año, hubo 25 alumnos en historia y 14 en lenguaje que obtuvieron más de 700 puntos en la PSU. Pese a ello, Legaza explica que “la idea no es trabajar sólo para los 700, sino lograr que el chico que llega con 400 puntos llegue a los 600 y tenga la posibilidad de postular a lo que quiera”.
Nervios
Si bien los preuniversitarios ayudan a tener un buen resultado en la PSU, no lo garantizan. En ocasiones, al momento de rendir la prueba, los alumnos dudan de sus conocimientos, no responden con seguridad y obtienen un mal puntaje. “Muchas veces, los estudiantes no consideran la variable nervios que claramente también incide al momento de responder”, explica Luis Legaza.
“Ha habido alumnos que obtienen 800 puntos en los ensayos, pero cuando dan la PSU sacan 630”, asegura el profesor de Lenguaje.
La brecha entre los colegios
Pese a que los resultados del preuniversitario de Luis Legaza y Antonio Kirigin son buenos, ambos reconocen que hay diferencias sustanciales entre un establecimiento educacional y otro.
“La brecha es muy notoria, sobre todo en Lenguaje, porque esta prueba no tiene que ver con conocimientos sino que con habilidades como la comprensión de lectura que principalmente se adquieren en el colegio”, explica Legaza.
La clave
Para ambos profesores, el éxito en la preparación de la PSU está dado, en parte, por la relación estudiante-docente.  “Es muy importante tener un buen guía. El alumno debe creer en el profesor”, afirma Kirigin. A su vez, Legaza concuerda con su socio y asegura que “la clave está en que nosotros tenemos un trato amistoso con los chicos, tratamos de animarlos”.
Según el profesor de Lenguaje, la humildad y la perseverancia son dos elementos sustanciales para tener un buen puntaje.  “Tú tienes que creer mucho en lo que haces sino nada te resulta”, enfatizó.
En la prueba de Lenguaje, Legaza afirma que “el éxito está en un trabajo sistemático y en darle mucho énfasis al desarrollo de ejercicios y guía”. “Con la mayoría se logra, con otros no”, dice entre risas el profesor.