En sesión del Concejo Municipal presidido por el alcalde de Punta Arenas, Valdimiro Mimica Cárcamo, ayer se discutieron varios puntos en tabla como: subvención municipal, patentes de alcoholes, comodato Asociación Regional de Boxeo, solicitud de una Iglesia Pentecostal. En la ocasión, además, la concejala Claudia Barrientos entregó un informe de su cometido en la ciudad de Estrasburgo, Francia, donde participaron con el alcalde en la inauguración de la feria denominada “Allende y Neruda, Inolvidables”. Asimismo, se vio la posibilidad de que exista un intercambio cultural con los artistas.
Posteriormente, en el punto “Varios” se acaloró la sesión. El Concejal Emilio Boccazzi dijo que existía la posibilidad de que viajara a Bariloche, en su calidad de presidente de los concejales, al foro patagónico de todos los concejales de todas las provincias argentinas, por una invitación del consulado argentino. Esto contó con la rotunda negativa de algunos ediles, quienes llamaron a ser austeros. En tanto que el alcalde, el concejal Antonio Ríspoli, Claudia Barrientos y Mario Pascual trataban en vano de aclarar que había que demostrar en el exterior de que la ciudad de Punta Arenas funcionaba normalmente y que se debía trabajar en posicionar a la ciudad como puerta de entrada a la Antártica. Finalmente, esta discusión terminó en nada, ya que el propio Boccazzi se bajó. “Me pareció pertinente participar porque el sábado pasado tuvimos la visita de Pablo Grasso, presidente del Concejo Deliberante de Río Gallegos, quien tuvo la deferencia de venir a Punta Arenas con varios artistas para recolectar ayuda para las víctimas del terremoto. Me pareció importante devolver este gesto y participar para avanzar en temas de integración. Cuando vi la mala disponibilidad del concejo, lo que hice fue retirar mi petición, la verdad es que yo no tengo ninguna necesidad de ir a conocer Bariloche porque lo conozco”, expresó.