Han pasado dos semanas desde que el terremoto y el tsunami afectó la zona centro y sur del país y, si bien los vuelos se han regularizado, existen familias que aún no han podido regresar a la región.
Esto ha generado que un porcentaje de alumnos no haya podido reintegrarse al período escolar, según lo reconocen algunos directores de establecimientos de la comuna.
Cada una de esas situaciones han sido justificadas y los docentes han podido confirmar el buen estado de las familias. Sin embargo, uno de los escenarios más extremos se está viviendo en el Liceo Sara Braun.
Hasta allí llegó un estudiante con sus padres solicitando matrícula, puesto que dejaron su hogar en una de las zonas afectadas por el terremoto para comenzar una nueva vida en Punta Arenas.
En estos momentos se están realizando los trámites de rigor en el Ministerio de Educación (Mineduc) para poder integrarlo a la entidad educativa.
Se espera que recién a fin de mes vuelvan todos los alumnos a sus aulas. Considerando que las razones de las inasistencias son de fuerza mayor, el Mineduc informó que elaborará un documento para guiar a los directores sobre cómo abordar las horas perdidas por los estudiantes, con el objetivo de que este hecho no los perjudique a fin de año.