
La investigación en contra de Edgardo Marcelo Miranda Villalón la dirigió el fiscal Claudio Rebeco y, de acuerdo con los antecedentes de la acusación, esta persona, obrando como mandatario de la víctima Hugo Faúndez López, en el cobro del precio de venta de un departamento del afectado, se apropió indebidamente de los
$ 54.000.000, “no restituyendo su monto al mandante al término del encargo, pese a los requerimientos hechos por éste en tal sentido”.
Para lograr su objetivo, Miranda Villalón cobró una parte del monto total a través de un vale vista emitido por el Banco de Chile, por un monto de $ 24.000.000, “a sabiendas que la firma de su beneficiario, puesta en el endoso de dicho instrumento, había sido imitada o contrahecha”.
La fiscalía llevó a juicio al detenido por “delitos reiterados de apropiación indebida y uso malicioso de instrumento privado mercantil”. Esta persona registra en sus antecedentes personales una condena anterior, de 1992, como autor de manejo en estado de ebriedad y en mayo de 2000 lo sancionaron a cuatro penas de 61 días de presidio, como autor de giro doloso de cheques.
Condena
El acusado fue condenado como autor del delito de uso malicioso de instrumento privado mercantil falsificado, en grado de consumado, cometido el 18 de noviembre de 2008, en perjuicio de Hugo Faúndez López; y, del delito de apropiación indebida de dinero, en perjuicio de la misma persona, el 19 de noviembre de 2008, “siendo el primer ilícito un medio necesario para la comisión del segundo”.
Por estos hechos le impusieron a Miranda un castigo de cuatro años y un día de presidio, sin beneficios, y el pago de una multa equivalente a 21 UTM
($ 767.949).
En el fallo existió un voto disidente, correspondiente a la presidenta de sala, Marcela Nash, quien fue del parecer de absolver al detenido, por estimar que no se acreditó la acusación de la fiscalía.
Aun cuando de alguna forma siente que se hizo justicia, el ministro Hugo Faúndez considera que no es suficiente en comparación a lo que perdió. Dijo que lamentablemente el dinero correspondiente a la venta del departamento no lo podrá recuperar jamás.