
Fernando González Araya, condenado a diez años de cárcel por el escalofriante homicidio de su tía, le dijo en una oportunidad al médico siquiatra que “la madre es lo más sagrado que uno tiene”, y que por eso decidió agredir a Bórquez, porque no soportó que esta persona fuera tan maldadosa con su propia madre.
El episodio transcurrió al interior de la unidad siquiátrica forense de la cárcel de Punta Arenas, a fines de enero del año pasado, después de que Bórquez entrara a cumplir la condena que le impusieron los jueces por la violenta agresión en contra de la octogenaria mujer, Elsa Soto Pérez. El agredido fue trasladado por funcionarios de Gendarmería al Servicio de Urgencia del hospital regional a donde llegó con el arma cortante incrustada en la cabeza.
El fiscal Oliver Rammsy propuso al acusado Fernando González Araya un procedimiento abreviado, el cual aceptó y fue condenado al término de la audiencia. La sentencia se conocerá este viernes, a las 13.00 horas.