
Un control rutinario de tránsito le permitió a personal de Carabineros del Retén Kon Aiken decomisar sacos de centolla, producto que se encuentra en veda biológica. Una patrulla circulaba por la Ruta Y-530, camino que conduce a Punta Prat, cuando a la altura del kilómetro 22, se cruzaron con una camioneta de color blanco cuyo conductor fue conminado a detenerse. Al solicitarle la licencia de conducir los funcionarios pudieron percatarse de que el chofer tenía la documentación vencida del vehículo. Mientras realizaban este control de rutina, el conductor y acompañante se comenzaron a poner bastante nerviosos. Esto llevó a los policías a revisar la carga que llevaban en la camada, descubriendo que se trataba de centolla seccionada, que en total sumaban 15 sacos. Lo más lamentable es que el crustáceo se encuentra en veda, una situación que anteriormente lamentó el fiscal que investiga los delitos medio ambientales, Eugenio Campos, cuando el martes fueron detenidas cinco personas, sorprendidas con 567 kilos de centolla faenada.