
Luego de un mes de análisis la comisión entregó un informe de 66 páginas más algunos anexos donde se planteaban dos posturas para abordar la materia. En la primera de ellas, que es la mayoritaria, se recomienda un reajuste en torno al 3%, en base a la inflación esperada para los próximos 12 meses. La otra, es que sumado al factor de la inflación, se considere la producción y la distribución del ingreso como había sido hasta 1990.
Después de dos extensas reuniones tanto los trabajadores agrupados en la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), como el gobierno representado por el ministro de Hacienda, Felipe Larraín y del Trabajo, Camila Merino no llegaron a acuerdo. Pese a esto el Ejecutivo ingresó un proyecto de ley a la Comisión de Hacienda de la Cámara Baja donde proponía pasar de 165 mil pesos a
$ 170 mil.
Esta oferta estaba muy por debajo del 10% propuesto por los trabajadores, cifra calificada como excesiva por parte de la autoridad “185 mil pesos es mucho (20.000 más que el actual), hay un informe de una comisión técnica y ese documento señala que en las actuales circunstancias hay que privilegiar el empleo”. Sin embargo, y pese a los argumentos del ministro la propuesta del gobierno fue rechazada por siete votos contra seis después de cinco horas de debate.
Ante este escenario, el Ejecutivo hizo una contraoferta de un 4%, que representan un adicional de $ 1.250, pero que no cuenta con la aprobación de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) ni de la oposición.
Lo anterior significó que el gobierno quitara la suma urgencia al proyecto, lo que atrasará la votación en la sala de la Cámara hasta el martes 29 de junio, fecha a la que se espera llegar con un consenso respecto al monto del reajuste, para que sea aprobado en el Senado el miércoles 30, ya que debe comenzar a regir el 1 de julio
El diputado independiente, Miodrag Marinovic, rechazó la propuesta del Ejecutivo de aumentar en un sólo 3% el salario mínimo, pidiendo que este llegue a 175 mil pesos. “Hemos rechazado un proyecto que nos parece injusto y que puede mejorar a través de un incremento superior a la cifra mínima que está planteando el gobierno”, indicó el parlamentario cuyo voto fue decisivo para que la iniciativa no prosperara en la mencionada comisión.
Marinovic explicó que hay más de 1 millón de personas que ganan el sueldo mínimo y “nosotros creemos que el empresariado puede hacer un esfuerzo adicional en término de lograr, al menos, lo que han solicitado los distintos organismo del trabajo: la CUT y la ANEF, que hablan de
$ 175.000”, precisó.
En tanto, la diputada Carolina Goic fue categórica al manifestar su rechazo al reajuste propuesto por el gobierno. “Durante los meses de campaña escuchamos en el discurso de Piñera hablar de terminar con los sueldos indignos y proponía para los trabajadores del país un sueldo digno, pero resulta que pareciera que ese sólo fue un discurso de campaña, pues al primer proyecto de ley que ingresa al Congreso relacionado con el sueldo mínimo, se olvida de sus promesas y hoy les da vuelta la espalda”.
Finalmente, la parlamentaria dijo que insistirá en establecer un sueldo mínimo diferenciado para Magallanes, pues para nadie dijo, es un misterio lo que significa vivir con un sueldo mínimo en esta región extrema, “por eso cuando vemos que el Gobierno pone primero los intereses de los empresarios sobre los trabajadores nos molesta”, apunta la diputada.