
Si bien desde la Cormupa afirman que no hay ningún tema que sorprenda del pre-informe, lo cierto es que los $ 3.990 millones que tiene de déficit, hace pensar que un estudio detallado y elaborado por una entidad neutral, sería un aporte para saber con certeza cuáles fueron los errores para llegar a la grave situación financiera en que se encuentra.
El retraso de la Contraloría en la entrega final en esta investigación y en las otras que tiene pendientes, como la de los buses amarillos o el supuesto “despilfarro” de recursos del alcalde de Timaukel, Atilio Gallardo, donde hasta a la Fiscalía le es útil el resultado de dichas indagaciones, se debería a que no tienen el personal suficiente para realizar todos los requerimientos que han surgido en los últimos meses.
Sin embargo, podría ser beneficioso para la corporación que no se conozcan todavía los resultados, puesto que el informe será tajante en cuanto a las responsabilidades del déficit, las que podrían incidir en los concejales para que entreguen su voto a favor de nuevos aportes económicos que solicitará la entidad comunal para mantenerse “a flote”, donde se incluye el requerimiento para que el municipio gestione en nombre de la Cormupa un préstamo de $ 1.000 millones a la banca. Esto, aparte de los $ 200 millones que necesita para los próximos meses.
En tanto, la Contraloría Regional no se refiere a sus investigaciones, por lo que los interesados en sus pericias sólo les resta esperar a que puedan concluir algunos de los casos más relevantes, como es el que se está llevando a cabo a la corporación, puesto que involucra el manejo de los fondos destinados a la educación de los niños de la comuna.
Expectación
Además de las gestiones que debe efectuar la corporación para conseguir los $ 1.000 millones como crédito bajo el sistema “leaseback” y, más adelante, los $ 200 millones mediante un aporte municipal, está “cruzando los dedos” para que durante los próximos días el ministro de Educación, Joaquín Lavín confirme que cancelará $ 5 millones mensuales por el arriendo de las instalaciones que utiliza la Seremía del ramo en la parte posterior del Liceo Luis Alberto Barrera, puesto que significaría tener saldada la cuota mensual por subvención anticipada que fue requerida en administraciones anteriores y que es uno de los gastos de arrastre más grande que deben asumir las actuales autoridades.