En las últimas tres décadas hemos sido testigos de cómo el sector desde Avenida Pedro Aguirre Cerda hacia el sur ha ido creciendo año a año. Nuevas poblaciones, villas, condominios, han cambiado el paisaje de este territorio que hoy luce muy distinto, el cual está lejos de no seguir expandiéndose con la construcción de viviendas, calles y avenidas que están proyectadas.

Este crecimiento ha traído, como era de esperar, la demanda de la instalación y llegada de varios servicios, que son requerimientos básicos, en algunos casos indispensables, para el buen vivir de los habitantes que han llegado a poblar el sector sur de Punta Arenas desde el borde costero hasta lo más alto de la ciudad.

Con el paso de los años, por nombrar algunos, se han levantado centros de atención primaria de salud, entre ellos el Servicio de Alta Resolutividad (SAR), que fue una demanda y lucha de los vecinos, que por años hicieron ver a las autoridades que contar con un servicio con estas características podría salvar la vida de algún habitante del sector.

Pero así como por años las voces de los vecinos demandaron la presencia de servicios del área de la salud, hoy levantan la voz por la seguridad ciudadana, exigiendo la presencia de un cuartel de Bomberos y de un cuartel de Carabineros. En el ámbito bomberil, ya existe un anuncio que debe concretarse próximamente, anuncio que dice relación con el traslado al sector de sur de la Segunda Compañía de Bomberos de Punta Arenas, para la cual ya está destinado un terreno.

Pero qué pasa con la construcción de un cuartel policial. Durante los últimos días se encendieron las alarmas de los vecinos y dirigentes vecinales tras leer las declaraciones de la delegada presidencial de Magallanes, quien descartó la construcción de una unidad policial para el sector sur, aduciendo, entre otros factores, la falta de dotación de funcionarios.

Si bien sabemos que la falta de efectivos policiales es una realidad, pues desde hace años esta tónica se ha ido dando, también es una realidad que un proyecto de estas características no se hace de la noche a la mañana. Cálculos aproximados estiman que la construcción de un cuartel policial tomaría un mínimo de entre tres y cuatro años, tiempo en el cual la falta de dotación podría revertirse. Por eso los vecinos instan a las autoridades a no renunciar e iniciar desde ya la elaboración de un proyecto que a futuro dote de un inmueble policial al sector sur de Punta Arenas.

Pero mientras tanto qué. Como decíamos, los habitantes y los dirigentes vecinales han señalado que no cesarán en su demanda, motivo por el cual se reunieron con autoridades comunales a quienes les hicieron ver su preocupación por la realidad que día a día se vive desde hace tiempo sin que tengan una solución. En respuesta a su demanda, las autoridades comunales les expresaron que buscarán la forma de poder prestar un servicio permanente, de manera de brindarles mayor seguridad.

Punta Arenas está creciendo y lo seguirá haciendo; por lo tanto, las demandas seguirán aflorando en distintas áreas, hoy el clamor es contar con una instalación policial, pues bien sabemos que la seguridad es sinónimo de tranquilidad.