Muchos de los casos policiales, en especial aquellos vinculados a la violencia intrafamiliar, según expertos clínicos, pueden estar ligados a enfermedades mentales.
La explicación que aventura al respecto el encargado de Salud Mental del Ministerio de Salud, es que tendría relación con las graves desigualdades sociales que atraviesa el país.
El tema es muy complejo. Por la crueldad con la que actuaron hace unos años contra Nabila Riffo se nos vino a la mente el caso de Carola Barría en la Región de Magallanes, pero casos similares hay todos los años y en todo el país.
Las tasas de incidencia de las enfermedades no son siempre reflejo de fenómenos biológicos, sino de muchos otros factores.
La tasa de suicidios, que habría aumentado en Chile en los últimos años, es una de las más complejas de interpretar, pues en muchos países de la región es común que los fallecimientos por esta causa no se registren como tales.
Así ocurría en Chile hasta hace corto tiempo y no está claro si ha habido modificaciones en los criterios de registro.
En Magallanes y Antártica Chilena una de las enfermedades más graves que aqueja a una alta tasa de la población es precisamente la depresión.
Y respecto de las licencias médicas como medio para descubrir la incidencia de una enfermedad, como lo podrían ser las licencias por depresiones, la experiencia en nuestro país debiera ser motivo suficiente para dudar de lo que verdaderamente representan esos permisos.